EL CAMINO DEL NORTE.
He regresado del Camino...
He vuelto, intermitente, como la luz del faro, como la de la luna... intermitente como las aguas que inundan los cauces de los ríos, como las olas...
Aquí estoy, mucho más rica, en experiencias, en historias...
Me he traído miradas ajenas guardadas en la mochila, sonrisas llanas, espontáneas...
Me acompañan ahora manos amigas, protectoras... que saben dar y que saben pedir, manejando un equilibrio perfecto.
Vengo poblada de silencios impregnados de cantos de cigarras, de grillos, de miles de pájaros ejecutando gratuitos conciertos.
Y mi piel ahora es verde y tostada como la hierba fresca y jugosa. Mi talle, suave como los collados que permiten el paso de un cerro a otro cerro.
Mis pechos semejan lomas y mi vientre una lenta vaguada hacia la tierra prometida.
He regresado, intermitente, como el baile del viento entre los árboles.
Como el sonido de las pisadas, el perfil de las huellas sobre el barro...
Como el eco de las palabras, como la fragancia de los bosques...
Intermitente... como la presencia de la luna... de la luz del día y el refugio de la noche...
He regresado a medias... porque algo de mi alma se ha quedado sentada al borde del Camino, como un murmullo entre las piedras, como brote permanente de hojas en los árboles, como vuelo de pájaros, vagabundeando con los perros sin correas...
Algo de mi se ha quedado por el aire, por las cumbres... por las olas.
Algo de mi, acurrucado, por tu alma...
Algo de mi, acurrucado, por tu alma...
Consuelo
Mayo, 2012
Bienvenida peregrina!!!!!! has regresado y eso se agradece!!!!! te quiero hermosa!!!!
ResponderEliminarsweetness flows along with your words ....~~~~~~~
ResponderEliminarGracias chicos, vuestras palabras son preciosas.
ResponderEliminarUn beso fuerte para cada uno de vosotros.