martes, 21 de mayo de 2013

DESCONOCÍA EL PODER DE MIS ALAS

...

Nunca supe quedarme prendida en un abrazo
retenida debajo de las sábanas
quizá por eso no haya dedos que recorran ahora
lentamente, el surco de mis pliegues
ni besos que se alimenten de mis lágrimas
ni palabras susurradas al oído.

No pude retenerme con abrazos tiernos
ni quedarme asomada a una ventana
manteniendo la puerta semiabierta
como una mirada entornada.

No.
Tuve que salir.
Abrir los ojos y
tragar las lágrimas.

Mirar la vida
sonriendo a mi manera.

Experimentar el vuelo...

Galopar sobre todos los vientos
hacia esa tierra nueva
que de forma lenta
inmisericorde
me llamaba.

Desconocía el poder de mis alas
pero ahora ya puedo nombrar
el cielo que para sí me guardaba.

Consuelo
Mayo 2013


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