Rojo, anaranjado,
tu cuerpo de fuego.
Amarilla tu sonrisa,
suave, de tierra.
Verdes y azules
tus ojos profundos,
de agua.
Añil y violeta, el aire
que exhalas,
cuando levemente suspiras
y me nombras.
Consuelo
Marzo 2014
Veo la lluvia correr tras el sol, sólo por ver tu palabra prometida hecha arcoíris.
ResponderEliminarBicos.
:)
ResponderEliminarUnha chea de bicos, meu!