lunes, 4 de noviembre de 2024

EL PRIMER CAFÉ DE LA MAÑANA




De verdad que sí, que me encanta amanecer con él, compartir los primeros momentos del despertar y bajar luego, juntos, riendo, para tomar nuestro primer café del día. 

Pero creedme también que adoro las mañanas en las que me despierto antes y me escurro silenciosa, desde nuestra inmensa cama, escaleras abajo, hasta la inmensa cocina que parece esperarme, pues todo en ella me recibe lleno de luz, de paz y de armonía.

Promete ser un momento perfecto, y a solas comienzo a trazar el ritual del café, moliendo un puñado de granos, que estallan en mil aromas afrutados, soleados, envolventes y nítidos.

El lento burbujeo me hechiza, y fijo mi vista en esa oscura y lenta ascensión que va inundando de aromas a dulzura la casa entera.

Lo aspiro, como un heroinómano aspiraría su primera raya matutina, y mientras la cafetera se llena, mis manos ágiles y menudas van devolviendo los utensilios a sus sitios,  para que ninguno se sienta desubicado.

Mis dedos lentos se demoran dibujando pájaros sobre la encimera, mientras mi vista se desliza más allá del ventanal, hacia donde los árboles  se mecen, como deseándome los buenos días, luego mis dedos retornan a su nido alrededor de mi taza preferida.

Antes del primer sorbo respiro profundamente, ahora que la mañana es tan mía, antes de que bajes y me hables de economía, o de mi absurda preferencia por la tortilla de patatas, siempre sin cebolla, o de como el sol te hace guiños cuando danza sobre mi pelo.

Apareces en el marco de la puerta, como si mis pensamientos te hubiesen conjurado y sonriendo te paso tu taza.

Nos besamos y compartimos nuestro primer café de la mañana.

C
Noviembre 2024







 



2 comentarios:

  1. "Nos besamos y compartimos nuestro primer café de la mañana."

    ... Y nos reímos suavemente mientras el sol comienza a colarse por la ventana, prometiéndonos un día lleno de posibilidades.

    Bello, como siempre y capaz de inspirarme hasta a mí.
    Mil bicos, miniña. Y quiero seguir leyéndote.
    Manolo.

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  2. Todavía huele a café....
    Un abrazo fuerte.

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