PAISAJES INTERIORES

Qué puede importar que aúllen los lobos

por los interminables paisajes boscosos

que se van adentrando en lo profundo de mi corazón,

si yo puedo sentir que vagan en libertad

por estas amadas llanuras de nieblas azules.

Qué puede importar que sienta al Minotauro,
vibrar y retumbar

en las horas más oscuras,

al hacer sus solitarias rondas por el intrincado laberinto

de mi corazón, 

si está henchido de sol.

Es hermoso sentir

que lo salvaje y lo tierno pueden convivir en armonía,

y qué donde moran las fieras más salvajes

también pastan los unicornios más azules

en mansos bosquecillos de riachuelos cantores.

Así es mi corazón

que al norte, donde su rítmico latido

de sangre golpea rojos horizontes,

se torna en profundos mares

de inmensas, serenas y verdeazuladas olas.

En este misterioso lugar que yo soy

confluyen océanos, lagos y flores,

y en amor vagan fieras y unicornios

bajo un millón de las estrellas más azules.

C

Abril 2019

ABRIL Y YO

Es todo tan perfecto

tan ajustado a su papel

que no puedo hacer nada más que suspirar

sonreír de felicidad
y tal vez,
volver a florecer.

Qué lejos queda cualquier diámetro

qué lejos cada amanecer

cada medida

cada tiempo de atardecer ...

Un leve suspiro

y la certeza de ver

de sentir
de amar

dejando que todo encaje en su lugar.

 Así,
así  es como me puedes nombrar.

C
Abril 2019

HABLEMOS DE LAS HORAS

Hablemos de las horas

y de la vida que transcurre,

mientras me nombras en tu silencio

más espeso y más tierno,

lleno de espumas de mar

y de flores en primavera,

silencio que engarzas 

con miradas perdidas hacia horizontes tardíos

y con música escondida en besos de cristal.

Hablemos de este tiempo

que nos lleva,

como un sendero,

al roce de las manos

de las miradas

y de los labios

suaves como trinos

como estrellas

y zafiros.

Hablemos de las horas

o hablemos de tí y de mí.

C

Abril 2019

LA VERDAD DE UNA HISTORIA MUY PERSONAL

No es que no pueda respirar, por miedo a romperme,

cuando te pienso

sinó que va mucho más allá

y temo que se rompa el universo, por la mitad

y que se derramen todos los astros

en una lluvia incesante

de estrellas brillantes.

Y también temo, que de romperme,

o de abrirse mi pecho por la mitad,

si quedase mi corazón al aire

y toda esta inmensidad que siento

no supiese volar

y se desplomase,

sería el fin de la humanidad.

Quizá si alguien sobreviviese

y tuviera que escribir el final de nuestra historia,

de lo que tú y yo fuimos

de lo que siempre somos,

creo que jamás, jamás
lograría acercarse a la verdad.

C

Abril 2019