Lo ves?
Tus largos dedos de niebla y alambre
todavía saben como llegarme.
Me traen todos tus nombres
tiritando
cuando vienen buscando mi tacto
y me recorren entera
como si fuera una pequeña
pequeñísima
gota de agua.
Y me beben
saben como beberme
como tragarme
y al mismo tiempo saben
como dejarme.
Y yo me sigo lloviendo
a ratos
sobre tus dedos de niebla
de niebla
y alambre.
C
Noviembre 2017