MARIPOSAS DE ACERO

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Por el profundo abismo de mis venas

circulan flotas de navíos

portando incontables aviones

y a sus valerosos pilotos.

En ellas, en mis azuladas y purpúreas venas,

burbujean brillantes y nítidas

las estrellas que ellos suben a los cielos,

las brisas que dejan por el éter,

las flores y el tiempo en que florecen,

todas las estaciones,

y todo cuanto en ellas ocurre

o deja de ocurrir.

Y laten en mi corazón

cien, miles, millones

de corazones,

llenos de amor y de asombro.

Son los de esos pilotos avezados 

que emprenden vuelos temerarios

para surcar los cielos

y llenarlos de ofrendas

y de misterios.

Luego amanecerán para vosotros

los días, con los soles que todos ellos subieron,

despegando desde el profundo océano

que nace en el centro de mi vientre,

surcando como mariposas de acero

las corrientes de mis venas.

C

Octubre 2016