Ha vuelto la lluvia...
Ha vuelto, de nuevo, a casa,
con su lenguaje secreto
de signos y puntuaciones.
Y yo le pregunto
muy serena
por los mares
que pudo ella haber abierto
desde el centro de tu pecho.
Y por los ríos, le pregunto,
que tal vez ella pudo haber seguido
a lo largo de los surcos
que brotan de tus dedos.
E indago, muy tranquila,
si pudo haber crecido
un árbol, como nexo, en el espacio,
que de tu frente a tus ojos,
como un profundo abismo
se derrama.
Y ella me mira muy segura,
y complaciente me responde
con su lenguaje ligerísimo
de signos y puntuaciones
que saber yo puedo,
sintiéndola,
saberlo, absolutamente, todo.
C
Enero 2018